“Jamás pensé que mi chiquita terminara aquí”, es lamentablemente una de las frases comunes de madres y padres frente a la camilla donde médicos hacen esfuerzos por estabilizar a su hija.

De acuerdo con profesionales del Hospital Nacional de Niños consultados por lizethcastro.tv, las causas más comunes por las que un menor termina internado, son aquellas en que los adultos no previenen la gravedad de las consecuencias.

Una emergencia, muchos dramas

Según la doctora Andrea Monge, los menores terminan en sala de emergencias por: Quemaduras, intoxicaciones, mordeduras de perro, accidentes de tránsito y caídas.

Un niño puede caer enfermo por la falta de cuidado de los adultos

“A veces somos descuidados con los envases de algunos procuctos. Por ejemplo, guardar cloro en una botella de Coca Cola. El niño no mide que eso es tóxico y no se toma.  O dejar al alcance de los niños productos líquidos que son letales”, indica la Doctora Adriana Yock.

Agrega Yock que por ejemplo el uso de casco para los niños que andan en bicicleta es una medida que evita emergencias que al final, todos en la familia podrían lamentar.

“No hay accidente cuando se pudo prever la emergencia”

El trabajador social del Hospital de Niños, Esteban Granados indicó que el término “accidente” es discutible. “Un accidente ocurre de manera circunstancial, pero la mayoría de las emergencias que atendemos se pudieron evitar y preveer”.  Y aclara que ciertamente “En muchos de estos eventos no hay intención de provocarle daño al niño pero lamentablemente pueden generar incluso una incapacidad en el menor”, situación que marcará la vida de la niña o el niño por no haber pensado, el adulto que lo cuida, en que las consecuencias pueden ser más graves de lo imaginado.

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