“Juan Luis Guerra y los 4 40” han puesto sus pies en prácticamente todos los países del mundo. El compositor e intérprete estudió filosofía pero no siguió porque justamente decidió ser fiel a uno de sus amores: la música.
Luego de recibir premios, aplausos, reconocimiento, Juan Luis Guerra dormía mal y no había manera de que una palabra muy pequeña adquiriera vida en su corazón: paz.
¿Pero cómo podía faltarle algo a un hombre ícono de la música en el Continente americano? De hecho un rápido repaso por la carrera artística de este hombre nos dice que desde que lanzó, en 1988, el disco “Ojalá que Llueva Café”, ha vendido más de 20 millones de discos; ha ganado numerosos premios, incluyendo 16 Grammy Latinos, dos Grammy norteamericanos y dos Premios Latin Billboard. Este año, está nominado a 4 premios Grammy Latino por su disco “Todo tiene su Hora”.
Volvamos a la búsqueda de la paz. Decidió hacer un alto, llenar el vacío de su alma y encontró respuesta alejándose momentáneamente del escenario y acercándose a Dios. “Dependo de El. Cada una de las decisiones están guiadas por El. El es imprescindible”.
El dominicano siguió componiendo pero sus letras dieron un giro, e igualmente se reencontró con el éxito. Escribió “Las avispas” que llegó a ser número 1 en el top ten de emisoras y televisoras que no tenían corte cristiano.
Guerra continúa cantando porque la música es su vocación. Sigue bendiciendo la existencia de su esposa y siempre recuerda que a pesar de ser muy tímido, a principio de los 80’s, conoció a Nora Vega, una estudiante de diseño, y se atrevió a hablarle. Sostuvieron un noviazgo de cuatro años antes de contraer matrimonio. La pareja tiene 31 años de casados y dos hijos: Jean Gabriel y Paulina.
Juan Luis y Nora están totalmente comprometidos con la solidaridad y la ayuda social. Juntos son los líderes de la Fundación 440, creada en 1991, destinada a los más necesitados en la República Dominicana. Luego en 1999 cambió el nombre por Fundación Juan Luis Guerra.
En este video que, navegando me encontré, cuenta parte de su historia, su búsqueda de la paz y cómo al encontrarla, por nada en el mundo, la perdería.
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2 comentarios
Muy bonita está historia y todas las q nos compartes día a día
Que bendición así es no hay otro sólo al lado de Dios se logra la paz .no como la que da el mundo si NO la que da Dios.