Laura Chinchilla, vive con la certeza de que tiene lo que necesita para ser feliz. “Esa sensación de que el tiempo pasa cada vez más rápido te obliga a aprovechar más cada momento, a decir que no a aquellas majaderías que te hacen perder el tiempo, a no desgastarte escuchando tonteras”, asegura la mujer que hoy, lejos de la función publica, da clases en tres universidades fuera del país.
Esa sabiduría no sólo se la dan los años que la acercan a sus 6 décadas, sino la gran fortaleza interior con la que ha tenido que asumir los puestos públicos que la colocaron en posiciones de jefatura, en distintas administraciones, en dos de los tres poderes de la República.
La mujer, esposa, afronta el Alzheimer de su esposo con lo único que se necesita para vivir, con amor. Pero como la vida es de contraste, a la vez vive la alegría más enorme de sus últimos años: la graduación de ingeniero de su hijo José María, de 22 años, con honores además, de la Universidad de Princeton, Estados Unidos. “Ese momento fue una sintesis de todo lo fuerte que él ha sido y todo lo que hemos vivido“, dice con una sonrisa.
Chinchilla, quien es la primera mujer en ocupar la silla Presidencial en Costa Rica, en el período del 2O1O al 2O14, hoy de manera reposada habla de su papel de madre y del agradecimiento eterno al mejor compañero que la vida le pudo haber dado, don José María Rico, de quien nunca ha recibido una sola queja.
Lizeth Castro conversa con Laura Chinchilla para ser protagonista de MI VERSIÓN de la vida.
Te recomiendo de Archivo: Claudia Dobles, mi versión.
2 comentarios
Muy bella entrevista.
Realmente las mujeres somos subestimadas y nadie conoce el gran poder que hay detrás de cada una de nosotras cuando de ocupar cargos “de hombres” se refiere.
Gracias Lizeth por darnos esta agradable nota.
Excelente entrevista doña Laura es un ejemplo a seguir para muchas mujeres q luchamos contra muchos obstaculos la admiro tanta a ella como a ud Liz. La felicito sos un orgullo de mujer