Carlos Alberto llegó a dejar de caminar, tal era el dolor que le producía una hernia inguinal.
Quería recuperar lo más pronto su salud. Tenía una razón poderosa para buscar ayuda: el ingreso que percibe como pintor de casas, es importante para aportar a su hogar, donde vive con dos hermanas y sus papás, dos adultos mayores que dependen al cien por ciento de los hijos.
En busca de un lugar donde le pusieran la debida atención, llegó a ASEMBIS, en su sede de Alajuela Ahi, le indicaron los pasos a dar para que la trabajadora social estudiara su caso.
Pronto le avisaron que le subsidiarían el 5O% de la operación. “Imagínese, me avisaron a los días que ya tenia fecha para operarme. La paz volvió a mí”, nos relata.
Hoy, recuperó su calidad de vida al 1OO% como fruto de la solidaridad de ASEMBIS. .