Todo depende…

Podría ser más cobarde el que se queda que el que huye…

Podría ser más fuerte el que renuncia, que el que permanece hipotecando su felicidad…

Podría ser más inteligente el que se queda callado, que el que habla y se convierte en esclavo de sus palabras…

Podría ser más débil el que quiere pelear, que el que decide cuándo dejar de pelear…

Podría ser más rico el que pierde algo para conquistar su paz, que el que se siente poseedor de todo y pierde la paz…

Podría ser más inseguro el que más grita y más se escucha, que aquél que habla poco…

Podría ser más sincero consigo mismo aquél que llora, que aquél que ensaya para que no lo vean llorar…

Podría ser más presente el que aparece cuando lo necesitan, que el que está siempre pero no hace nada por ayudar…

Podría estar trabajando más en construir su propia historia aquella persona que cierra los ojos y reflexiona, que el se acuesta cansado de tanto trabajar…

Podría honrar más a Dios aquél que se arrodilla y no se siente merecedor de su amor,  que aquél que recita versículos y está de pie…

Podría ser más amado aquél que tiene pocos amigos, que el que es el rey de la fiesta…

Todo depende.  Todo es tu decisión.  Lejos de etiquetas, decidí cómo vivir tu propia vida. Las etiquetas se hicieron para la ropa. Para vos se hizo el derecho a ser feliz y el privilegio de decidir.

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Acerca del Autor

Soy periodista desde que tengo uso de razón. Siempre me gustó preguntar por todo y escuchar respuestas, incluido el silencio como la mejor en algunos casos.

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