Ir a Africa fue una de las aventuras que el Doctor oftalmólogo Dario De Calice comparte con nosotros en este relato. Hoy es miembro del equipo de especialistas en ASEMBIS.
La vocación de ser médico tocó la puerta del costarricense Dario De Calice, siendo aún muy niño. “Yo se lo dije a mi abuela, pero nadie más en mi familia era doctor. Fue algo que simplemente pensé y cuando fui grande lo realicé”.
De Calice llegó a enamorarse de la oftalmologia de una forma tan apasionada, que ni siquiera él hubiese advertido en su juventud que así seria.
¡Hola Continente Africano!
Este amor por su profesión lo llevó hasta Africa, donde realizó cientos de cientos de operaciones.
“A veces la gente caminaba horas y horas para llegar a una cita. Por más cansado que uno estuviera, jamás le iba a decir a alguien que ya no lo atendería. Fue una experiencia maravillosa y agotadora a la vez“, afirma.
El oftalmólogo regresó a Costa Rica, con una sensibilidad humana, pulida por la experiencia.
En el país trabaja en varios centros privados. Uno de ellos es ASEMBIS, una empresa de salud, con vocación social: “Por mucho, ASEMBIS tiene el ambiente laboral más cálido que conozco”, asegura.