
Sergio hace un llamado al autoexamen testicular
“Todos los días me siento campeón. Al cáncer le digo: a mí usted no me vence y si me vence, que quede claro que antes: viví, reí, abracé y amé”. Sergio González, recién salía de quimioterapia cuando dio esta entrevista a la revista digital lizethcastro.tv.
A pesar de ello, su sonrisa fue permanente durante toda la conversación, brindando detalles sobre su enfermedad y lo que ha crecido con ella.
“Al principio me derrumbé”
Él nos cuenta: “No miento, cuando recibí la noticia me derrumbé, yo no sabía ni lo que era anestesia en una muela. Mi fe en Dios, me fue dando serenidad. Me di cuenta que el cáncer no es mi enemigo. Llegó para algo, para que busque lo bueno de esta situación y con lo poco conocido que soy, pueda crear conciencia, difundir información y promover la importancia del autoexamen”.
Fue en abril anterior, cuando el periodista de 29 años decidió realizarse el autoexamen testicular. En ese momento notó que había una “pelotita” anormal.
Continúa el jove ex presentador de TV : “Tras aquel autoexamen seguí con la idea dando vueltas en mi cabeza. Al llegar de viaje, le conté a mi mejor amiga y doctora, Maureen Vindas, ella lo detectó y me salvó la vida. Asistí al hospital, la noticia fue difícil de digerir, recuerdo que cuando me dijeron: es cáncer, pregunté: ¿Es maligno? El pasillo que va de la sala del ultrasonido a donde estaban mis papás, se me hizo eterno. Luego con el apoyo de los que amas vas poniendo buena cara”.
Hay un Sergio antes y después del cáncer

La red de apoyo de Sergio es clave para su batalla diaria
En cuestión de días, la vida de Sergio cambió.
Fue diagnosticado con cáncer de testículo e intervenido quirúrgicamente. Actualmente se encuentra recibiendo quimioterapia para erradicar por completo el padecimiento. “Hay un antes y un después del cáncer; el Sergio de antes se preocupaba más por la parte física, era más vanidoso, le importaba más la plata, los negocios. Ahora se preocupa más por sentir, ayudar y disfrutar. Veo claro que Dios me ha dado otra oportunidad, aprovecho el solcito de la mañana, el abrazo de mi novio, el beso de mis padres, esas cosas que realmente importan. El cáncer será un fantasma para siempre, por ese miedo a que regrese, pero no algo que me quite el deseo de vivir”.
“Si quiere llorar, llore, pero luche”
El joven de sonrisa constante, afirma que sus padres Rose Mary Vargas y Sergio González, así como su hermano Armando, su pareja Judko Rosenstock y sus mejores amigos Pablo Chavarría y Maureen Vindas, han jugado un papel importante en todo el proceso.
“Sé bien que las manos amigas nos dan mucha fuerza, por eso a quienes estén necesitando una, no duden en escribirme en redes sociales. A quien esté recibiendo el diagnóstico: Viene una prueba dura, pero hay formas de ganar la batalla, aférrese a la vida: Si quiere llorar, llore, pero luego: luche, sonría, póngale buena cara, que si se puede. Si es el caso, tener un testículo menos, no lo hace menos, hay prótesis y puede tener hijos, la erección es normal, la vida sigue normal. Hombres, hágase el autoexamen, cualquier pelotita, cualquier duda, asistan al médico. Mi cáncer fue descubierto en etapa uno, gracias a un autoexamen.”
¿CÓMO REALIZAR EL AUTOEXAMEN?
Según el último reporte de la Caja Costarricense del Seguro Social, ocho hombres son diagnosticados con cáncer de testículo mensualmente y de ellos uno pierde la vida.
Se recomienda realizar el autoexamen testicular a partir de los 15 años de edad, mínimo dos veces al mes. Examine un testículo a la vez estando de pie, preferiblemente después de tomar una ducha. De esta manera, la piel del escroto está relajada y fácil de manipular.
Tome nota:
. Palpe el saco escrotal suavemente para localizar un testículo.
. Use una mano para estabilizar el testículo. Use los dedos y el pulgar de la otra mano para palparlo de manera firme pero suave. Palpe toda la superficie. Debe hacer girar cada testículo entre los dedos de ambas manos (aplicando una leve presión).
. Revise el otro testículo de la misma manera. Si nota una masa o hinchazón anormal, visite al médico.
Esto le podría salvar la vida y le podría ganar la batalla contra un cáncer detectado a tiempo.
Periodista: Wendy Arias
1 comentario
Entiendo que es una prueba muy dura para cualquiera y pues si, Sergio decidió luchar porque podía. Podía pagar una clínica privada y sus tratamientos podía ir de un día para otro le diagnosticaron y al otro día programarán la operación.
Una historia muy diferente pasan miles de costarricenses, que se detectan alguna anomalía y cuando van al doctor (CCSS) le mandan un examen de sangre para dentro de 4 meses, porque ni urgente marcan dicho examen y así será con todo el tratamiento, citas, exámenes para cuando tengan una diagnóstico sea muy tarde.