De rodillas, así estoy. Hay mil palabras que quiero decir pero ninguna se atreve a quitarle el campo a la más grande.
Esa se pone adelante en la fila y abre la boca frente al Universo maravilloso, frente al Dios Omnipotente que con ternura está atento a lo que mi alma le quiere decir.
Abro la boca para decir esa palabra poderosa: GRACIAS.
Gracias por todo lo que aprendí en este año.
Gracias por lo que dejé ir,
gracias por lo que vino a mí para quedarse,
gracias por lo que no me pertenecía y se fue.
Gracias porque mi desacomodado corazón, encontró su acomodo y la paz que se había ido, regresó cuando la volví a llamar.
Gracias porque el dolor me enseñó qué tan fuerte soy y la dicha me enseñó que hay un tiempo para todo.
Gracias porque ejercité mi tarea más difícil, la paciencia y la mayoría de veces lo logré.
Gracias porque tengo tareas pendientes y dudas y proyectos y celebraciones que imagino serán hermosas y eso significa que me ilusiona la vida.
Gracias, nada más.
No se me ocurre pedir en este segundo. Es que, conmovida y con lágrimas en los ojos ya sé que lo que pida, se quedará pequeño ante la bondad majestuosa de Dios, y será posible cuando para mí es imposible.
Así que de antemano GRACIAS por lo que en algún momento pida y me será dado porque es para mí.
Gracias Señor por la vida, porque de rodillas solo frente a ti.
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5 comentarios
Verdad como la piedra que se movió y Jesús resucitó 🙏
Wow palabras salidas del corazón, tan sinceras y honestas… Bendito sea Dios por siempre…
Hermoso! Me siento totalmente identificada con tus palabras <3
Excelente punto de vista agradecer todo lo vivido
Completamente identificada con cada palabra Lizeth , se pasa por tantas situaciones en la vida …pero solo el echo de saber que tenemos un Dios que nos escucha y sabe nuestros más profundos anhelos y siempre nos llena de esperanza y mucho amor
Bellas palabras, me identificó mucho, gracias